Glen Moray es un whisky que se puede disfrutar en cualquier momento, ya sea como parte de una celebración o simplemente como un trago tranquilo en casa con amigos y familiares. El hilo común es que está ahí para ser disfrutado.

No hay muchas reglas sobre cómo disfrutar el whisky, lo principal es que lo disfrutes como a ti te gusta, pero aquí hay algunos consejos para ayudarte a apreciar y decodificar algunos de los personajes dentro de tu copa.

Al seleccionar un vaso para su whisky, no es importante sacar su mejor cristalería. Le sugiero que seleccione un vaso que tenga una bonita forma de tulipán (algo que se estrecha en la parte superior) que ayudará a mantener el aroma, ya que gran parte de la belleza de un buen whisky está en cómo huele.

Con un vaso de whisky en la mano es muy tentador solo beberlo, pero si te tomas un momento y miras el color del whisky te puede decir un poco de qué estilo puede ser. El color, ya sea dorado claro o un tono cobrizo más oscuro, a veces puede ser una indicación de la barrica que se ha utilizado (los colores más oscuros podrían indicar una barrica de jerez, mientras que los tonos dorados más claros podrían indicar una barrica de bourbon) y la profundidad del color puede proporcionan una pista sobre la edad de este whisky con licores más viejos que generalmente adquieren un tono más profundo con la edad.

Si su whisky está un poco más frío, es posible que desee «acunar» el vaso en sus manos para calentarlo, pero si está a temperatura ambiente, sostener el vaso en la base o por un tallo le permitirá agitar el whisky.

Cuando agite el whisky alrededor del vaso, cubrirá el interior del vaso muy ligeramente. Y si lo observa por un momento, el whisky correrá por el costado del vaso y formará lo que llamamos ‘piernas’ o ‘lágrimas’ donde el whisky se adhiere por un poco más de tiempo. Cuanto más se adhiere, más fuerte es el whisky y posiblemente también más viejo.

Pasar tiempo olfateando un whisky es importante para apreciar el carácter. Sus sentidos olfativos son excelentes para encontrar diferentes aromas y el whisky no es diferente. Sostenga el vaso, agite el whisky y acerque la nariz suavemente al vaso, huela ligeramente y absorba todos los aromas que salen del vaso. Al principio, puede encontrar todos los sabores fusionándose en uno, pero a medida que el whisky respira y se abre, comenzará a revelar nuevos aromas que a veces pueden ayudar a desencadenar recuerdos de otros olores.

La mayoría de los whiskies vienen con una lista de notas de olfato y cata en el empaque para ayudarlo a orientarse, así que no tenga miedo de meter la nariz allí y oler ese whisky. No te preocupes si encuentras algo diferente a lo que sugieren las notas porque nadie sabe mejor que tú lo que te dice tu olfato. Habrá muchas personas que querrán decirte lo que debes oler, pero solo tú podrás discernir lo que realmente puedes oler en el vaso.

Cuando pruebe el whisky por primera vez, puede encontrar el alcohol un poco adormecedor en el paladar, pero no se preocupe, ya que pronto se acostumbrará. Si lo encuentra demasiado abrumador, considere agregar una gota de agua, pero solo del tamaño de una lágrima, lo suficiente para calentar el whisky un poco y liberar esos aromas/sabores que han estado ocultos.

Deja que el whisky fluya por tu boca y deja que esos sabores te inunden. Algunos sabores serán audaces y en la parte delantera del whisky, algunos tomarán tiempo para persuadirlos y otros permanecerán un poco más, por lo que aún puede saborearlos mucho después de que se termine el trago; estos sabores se conocen como el final y los whiskies. Puede tener acabados cortos, medios o largos. 

¿Prefieres tu whisky con hielo?

Al agregar hielo, enfría el whisky y eso cerrará parte del sabor, esto incluso puede ayudarlo a apreciar otros sabores que se dejan sentir cuando se enfría un whisky.

Catar whisky, no es una prueba, no es un examen. El whisky está para disfrutarlo. es una experiencia Disfrútalo con tus amigos o tu familia. 

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