La historia de Karim Benzema es simplemente única. La edad es algo curioso en el deporte. Algunos atletas profesionales irrumpen a una edad temprana, brillando, aunque brevemente, como bengalas. Otros maduran con más lentitud, como el licor en las barricas. Y, finalmente, hay casos extraños como el de Karim Benzema, quien irrumpió en la escena mundial siendo un chico del Olympique Lyonnais y que, de alguna manera, improbable, no ha hecho más que mejorar desde entonces.
A lo largo de 14 temporadas con los gigantes españoles del Real Madrid, Benzema, de 34 años, ha ganado cuatro títulos españoles y cinco absurdas Champions League, marcando más goles para el club en el proceso que cualquier otro cuyo nombre no sea Cristiano Ronaldo. La temporada pasada, Benzema ascendió a un nivel aún más alto, capitaneando a su equipo tanto en La Liga como en la Champions, terminando como máximo goleador en ambas.
La buena racha le ha valido a Benzema el título de mejor jugador de la temporada de la UEFA, y le ha asegurado su primer Balón de Oro. Luego está la selección francesa, de la que Benzema será la figura protagonista en el Mundial de Qatar 2022. Francia llega al torneo como uno de los equipos favoritos y Benzema como uno de sus goleadores más temidos.
Para cualquier jugador normal, este crescendo tardío de su carrera podría sentirse como el clímax de algo. No es el caso del futbolista francés Karim Benzema, quien lo ve como la progresión natural de jugar a su manera. “Hoy, y en los últimos tres o cuatro años, simplemente he jugado el fútbol que quería y que sé jugar”, afirma. Durante una reciente pausa a la temporada por una lesión, GQ se sentó con Benzema para hablar sobre el Balón de Oro, la paternidad y el primer vistazo a su vida después del fútbol (nuestra charla sucedió antes de la premiación del Balón de Oro 2022).
Empecemos con el Balón de Oro. ¿Cómo te sientes al respecto? Aún no lo recibes, pero eres el favorito
“No, no, todavía no. Desde que era niño, ha sido uno de mis objetivos y sueños. No era algo en lo que pensara todos los días. No iba a los entrenamientos porque quisiera ganar el Balón de Oro, así no era. Pero siempre ha estado en mi mente desde niño.
Crecí con la generación que incluía a Zizou [Zinedine Zidane], y a Ronaldo, de Brasil. Esos jugadores ganaron el Balón de Oro. Y eso fue todo. Me enamoré del fútbol al verlos. Así que fue un objetivo desde que era pequeño, o quizá más bien un sueño. El año pasado, cuando quedé cuarto, estaba en el camino, pero no había ganado los grandes trofeos colectivos. Este año, gané todo. Tuve una gran temporada y, con suerte, ganaré”.
¿Qué significaría para ti?
“Muchas cosas. Ya es un sueño más que se hace realidad. Para mí, los sueños que tengo en la cabeza intento cumplirlos, al menos en lo que se refiere a mi carrera futbolística. Lo que siempre he soñado hacer, lo consigo. Cumplo un objetivo y luego paso a otro. Tiene una importancia especial para mí porque ha sido mi objetivo desde que era muy joven. A todo futbolista le gustaría ganar el Balón de Oro algún día”.
¿Qué piensas ponerte esa noche?
[Risas] “Todavía no sé qué marca o etiqueta, pero algo que me favorezca: Elegante, sencillo, con estilo pero no demasiado ostentoso. Algo que impresione y que cuando me lo ponga, me sienta bien con eso. Es más importante que me guste a mí antes que preocuparme si a los demás les gusta”.
Hablando de estilo, ¿qué es lo que más te gusta usar?
“Depende. Pffffff. Realmente todo depende de la situación: jeans, un pants. ¿Hay buen clima o no? ¿Estoy cansado o no? Aunque rara vez estoy cansado. Aun así, pienso en qué ponerme cada vez que salgo. Aunque solo sea ponerme un pants, no me voy a poner cualquier cosa. Me veo en el espejo y pienso: ‘Okay, esto está bien’ o ‘Esto no se me ve tan bien’. Me detengo. Me tomo mi tiempo. En cuanto a una pieza favorita, no sé. No juego fútbol para usar ropa de moda todo el tiempo”.
¿Coleccionas alguna prenda? ¿Tienes obsesión por algún artículo en particular?
“Tengo bastantes pares de sneakers de básquetbol en casa, incluyendo un par de Back to the Future [Nike Air Mags]. También tengo algunos de los primeros sneakers Adidas de hace mucho tiempo. Tengo muchos zapatos. Me gusta usar cosas de la vieja escuela. Tengo algunas prendas y zapatos que ya no se fabrican y que he guardado. De vez en cuando, me los pongo y los uso cuando salgo. Me gustan estos artículos y algunos modelos vintage más que los que se hacen hoy en día, por eso tengo más de esas piezas antiguas. Con las novedades de hoy, todo mundo lleva prácticamente lo mismo”.
¿Alguna marca favorita?
“No te voy a mentir, tengo muchas marcas favoritas. Y también muchas veces no me fijo en la marca. No me digo: ‘Es Fendi; es Louis Vuitton; es Hermès’. Si me gusta, me lo pongo. Un suéter sencillo, todo blanco, puede ser de cualquier marca, o incluso de ninguna, me lo pongo si me queda bien”.
¿Quiénes son tus modelos a seguir en cuanto a estilo?
“No tengo modelos a seguir, lo he hecho todo yo mismo. [Risas] He probado cosas por mi cuenta. Si funciona, funciona. Si me gusta, me gusta”.
¿Quiénes fueron tus héroes mientras crecías?
“Yo diría que mis héroes son mi padre y mi madre. ¿Por qué? Porque fue muy duro para ellos, muy duro. Cuando se trata de héroes para mí, solo son mi padre y mi madre. No tuve un jugador de fútbol como ejemplo a seguir. No voy a decir que me las arreglé solo, pero de donde vengo, tenía que triunfar en algo. Como tenía un poco más de talento en el fútbol, hice todo lo posible para triunfar en este. Hacia los 15 o 16 años, empecé a ver a Ronaldo, Zidane y algunos otros para aprender de ellos, pero no dije: ‘Quiero ser como él’”.
¿Sentiste la responsabilidad de ser el mejor por tus padres?
“No, no se trata de ser el mejor. Porque, para mí, en un deporte colectivo como el fútbol, no tiene sentido decirse a sí mismo: ‘Tengo que ser el mejor’. No puedes hacerlo solo. No es posible. Solo serás mejor si los que te rodean te ayudan a ser mejor y tú también les ayudas a ellos, anotando goles, ganando partidos. Para mi padre y mi madre, ya era suficiente con que fuera un futbolista profesional. Sé profesional, luego lo demás vendrá en consecuencia, y eso es todo. Mi objetivo, mi enfoque, es intentar ser lo mejor posible en mi campo”.
Cuando ganaste la Champions, estabas con tus hijos. ¿Qué sentiste en ese momento?
“¿Cuál dices? ¿El penúltimo, el cuarto? Cuando estaba con mi hija, ¿no?”.
Con tu hija, sí.
“Excelente, maravilloso. ¿Qué quieres que te diga? Me siento feliz cuando mi hija o mi hijo vienen al estadio, me ven y están contentos. Además, a mi hijo le gusta mucho el fútbol. Son cosas excepcionales, extraordinarias. No puedo describírtelas”.
Fuente : GQ México